...Esa tarde hacía mucha
calor, como olvidarla...
Había salido un rato antes de la facultad de Lomas
de Zamora extensión Zárate, porque el profesor de la materia Derecho Romano tenía
que viajar hasta capital.
Cuando salí había muchos chicos y gente mayor que
subía o bajaban la calle Rivadavia el transito era impresionante, pensé que tal
vez allá algún evento en el Club Náutico Arsenal, pregunte a un conocido y me
dijo que no, cuando hace calor todos salen a caminar a cualquier parte. Claro
me dije, fui hasta el coche que lo tenía estacionado más arriba en una
perpendicular a la calle Rivadavia y que ahora no recuerdo el nombre de esa
calle, lo tenía estacionado a media cuadra de la plaza Cooperativa Eléctrica,
cuando le fui a dar arranque el coche no respondió al contacto de encendido, me
di cuenta que había dejado las luces encendidas y estaba totalmente sin
baterías, comencé a empujarlo hacia la bajada de la Rivadavia que estaba a menos
de 50 metros, con tanta calor , el coche me parecía más pesado que de
costumbre, todos parecían no ver mi esfuerzo, y si miraban antes que les dijera
o insinuara que me ayuden miraban inmediatamente hacia otra parte. Solo lo empujé
20 metros y me dio sed, fui a buscar una gaseosa al kiosco de la facultad,
volví a comentar lo que me había pasado, pero nadie pregunto o se ofreció a
ayudarme, me di cuenta que el sentido de humanidad estaba prácticamente ausente
en sus conciencias. cuando regrese hasta el coche, decidí seguir caminando
hasta la plaza, y cuando llegue a la plaza recordé lindos momentos con mis
hijos y amiguitos de mis hijos que traje muchas veces a esta bonita plaza.
cuando termine la gaseosa mire hacia la barranca , sobre la calle Belgrano y que
estaba a solo a 60 metros desde donde estaba sentado, podía ver el cañaveral y
recordé cuando yo era niño y fui con mi padre a buscar cañas secas para armar
tutores para plantas de tomates que tenía mi abuelo.
Recuerdo muy bien esa mañana que fui con mi padre
y mi madre, al tiempo que daba fuertes machetazos a las cañas recuerdo que
decía en un sentido cómico:
"-Esto está de más, entonces hay que
cortarlo."
Me sonreí de ese recuerdo y fui caminando hasta el
cañaveral para revivir esos días felices, cuando llegue entre los primeros
verdores de yuyos y cañas, había por todas partes bolsas de basura, y me dije
todo cambia, y comencé a retirarme, justo cuando piso el asfalto, o acera de la
calle, escuché gemidos y alaridos sexuales que venían desde el cañaveral más
adentro, me dije que bajo hemos llegado los chicos hacen el amor en la basura.
bueno hay un dicho que dice el aceite se junta solo con el aceite, en ese
momento deduje que la basura se junta solo con la basura, cuando me fui
alejando e ignorando todo aquello, ya a casi 15 metros, escucho la vos de una
niña que pedía auxilio y alcance a entender que dijo entre cortado, la palabra
ayuda. Sobre entendí que le estaban tapando la boca, mi reacción fue inmediata
y prácticamente refleja, sin pensarlo, me regrese corriendo entre las malezas y
las cañas y en el camino levante un palo de casi un metro abandonado de alguna
obra, me acerque más veloz que mis pensamientos, sin pensar en las
consecuencias del horror de lo que vería, un hombre de más o menos 26 o 27 años
estaba violando a una niña, con una mano le tapaba la boca, y con la otra la
sostenía. El hombre no advirtió que yo estaba detrás suyo, sin embargo, se dio
cuenta que la niña si me había visto, entonces el delincuente volteo su cabeza
hacia atrás, donde estaba yo parado, en ese momento le golpee con el palo en la
cabeza, las cosas no daban para dialogar nada, solo reaccione así. Luego la
niña salió corriendo desnuda por la calle, hasta olvido tomar su ropa, mientras
corría pude ver que no tendría más de 12 años. El Hombre quedo tendido boca
Hacia arriba y las piernas le temblaban y sus ojos le quedaron hacia arriba,
desmayado o muerto? pensé, sin embargo a su cabeza no le salía sangre así que
seguro solo es un desmayo, tal vez se me fue la mano, me senté a su lado, y
revise sus pantalones para ver alguna identificación, su nombre era Jonatan y
su apellido por razones lógicas no lo pondré en este medio. en ese momento
recordé que tal vez era el tal Joni que en un intento frustrado quiso robarme hacía
más de 6 o 7 años. También había en la escena una moto vieja, cuando me dirigí
a abandonar el lugar note que estaba pisando algo duro y molesto, y comprobé
que era un revolver, en una primera observación , note que era calibre 22 largo
y todo atado con cinta de aislar cables, no me explico cómo llego nuevamente
esta arma a sus manos, y ahora nuevamente están en las mías, cuando llegue a la
plaza volví a recordar, cuando mi papa me decía:
"-Esto está de más, entonces hay que
cortarlo."
"-Esto está de más, entonces hay que
cortarlo."
No se me alejaba esa frase, tal vez sea un mensaje
o señal del pasado, nada está en nuestra cabeza por casualidad. Así que regrese
a la escena del delito con la sola intención de ya saben qué, pero no tenía con
que cortarlo, el seguía desmayado o muerto, todavía no lo sabía, y me asegure
tocándole la arteria que esta inmediatamente sobre el esternón, bueno, me dije,
al menos no soy asesino, el depravado estaba vivo, solo dormía, pero cuando
despertara tal vez le falte algo con que poder orinar, me dije, mire a mi
alrededor para buscar con que cortárselo, encontré solo una vieja chapa oxidada
de lata de tomates o algo así, pero cuando me acerque ni ganas de tocar esa
mugre, me senté a su lado pensando que castigo podría imponerle a mi antojo. no
se me ocurría nada, lo voltee boca a bajo y así como estaba con su pantalón y calzoncillos
bajos hasta las rodillas , le ate con unos trozos de alambres por la espalda,
en esos momentos ya no pataleaba, seguía durmiendo como un bebe, pero ni idea tenía
lo que le aria, y yo tampoco, lo ate a su motocicleta que estaba también tirada
entre las malezas y me fui a avisar a la policía. antes de entrar, me
arrepentí, me dije y que tal si lo deje cuadripléjico del golpe?, que diablos,
me volví hasta el lugar del echo, lo mire y seguía respirando, todavía no sabía
que aria con él, seguía atado todo con alambre en los pies y manos, me volví a
retirar y me fui a tomar un café a la estación ESSO que esta entre calle 19 de
Marzo e Ituzaingó, regrese al lugar, y mientras iba llegando se escuchaban sus
gritos que decían por favor, que alguien me ayude!! estoy atado, auxilio!!,
gritaba, la gente pasaba y nadie decía nada, me sorprendí, y más a mi favor
para mis planes que tenía para el idiota. cuando llegue, y me vio se desesperó más
aun, y comenzó a gritar, "socorro! me quieren matar! , socorro, !!!",
yo mire hacia la calle nadie parecía escucharlo, le dije ,
-Te acuerdas de mí?
-Perdón , perdón , no lo volveré a hacer, perdón,
señor, no me mate. Gritaba desesperado
-Claro que no voy a matarte, todavía, mira aremos
un trato, yo no denunciare lo que hiciste y tu no pedirás auxilio, que dices
Jony?
El depravado no dijo nada solo agacho la cabeza y
consintió mi trato, le aclare que si te socorren y la policía me lleva, diré
porque te golpee, y en mi declaración estará el nombre de la niña, que dices?
me denunciaras?, creo que al infeliz no tenía muchas opciones, y agregue:
-Imagina tan solo si vas preso serás Mujer y
Monona de tu celda. Sabes que soy más rápido que tu, voy a soltarte solo una
mano, la otra la seguirás teniendo atada tu cachivache de moto y ni se te
ocurra intentar soltarte porque te planto un plomo en la frente. Subite los
pantalones, que no se vean tus desgracias, mientras pienso que are con Tigo.
Con un tono muy lastimoso dijo que aceptaba mi
propuesta. Y se tocó la cabeza para calcular el tamaño del chichón que le había
quedado.
-No se te ve bien ese golpe, deberías tener más
cuidado, que dirás cuando te pregunten? si no te mato primero, claro.
-No me mate diré que me caí de la moto o que me
picaron las hormigas, diré lo que quiera, pero no me mate señor, por favor!!!
Cuando lo vi llorar sus facciones se habían
transformado por completo, ahora no era un lobo era un borreguito, en ese
momento, yo deseaba que intentara algo contra mí, así lo mataba, era un
desperdicio total a la sociedad, ni siquiera tenía los valores de un verdadero
delincuente, la de resistirse hasta la muerte, era un triste corderito listo
para faenarlo en pedazos si hubiera tenido una cuchilla, en ese momento, por
supuesto, igual que una magistral clase de anatomía para cirujanos
principiantes.
Ya estaba casi oscuro, y los mosquitos venían de
todas partes, lo seguía mirando fijamente, pero no me miraba, como que estaba
bien educado a los códigos de la cárcel , "jamás mirar a los ojos a tu
jefe. " , le dije toma esta bala, y ponla en tu boca, se la puso en su
boca , y le dije ahora trágatela, primero no quería, pero como sabía que yo era
más loco que él y podría matarlo, se la trago, luego le saque otro proyectil,
al revolver, la gente le dice bala y para que me entienda le dije, trágate
también esta bala, se la puso en la boca y en un movimiento como se consumen
las grandes pastillas se la trago sin esfuerzo, lo cual me pareció poco castigo.
-Toma esta bala también, y escúpela, en tu mano!
-Que tengo que hacer ? me la trago también? .
Pregunto tembloroso.
-No esta vez te la meterás ya sabes por dónde. Y
hacia movimientos con su cabeza que no lo aria.
-Que vale más tu culo o tu vida? . Y le puse de
inmediato la punta del revolver en la sien, y corrí hacia atrás la cola del
disparador, accionando el mecanismo de disparo listo para mandarlo al otro
mundo si se hubiera negado.
-No, no, no, Señor, no me mate!!
Luego con dificultad se introdujo el proyectil de
punta, ya saben por dónde.
-Empújatelo bien con el dedo.
Y lo hizo.
-Ahora chúpate el dedo, esta sucio.
Y lo hizo también, sin poner resistencia. Solo a
los ánimos y a las esperanzas de que si obedecía lo dejaría con vida.
-Te gusto?
- No. Dijo con tono muy penoso.
-Mira, por suerte te quedan 10 balas más que
encontré en tu pantalón, no me voy hasta que te las metas a todas una por una
de la misma forma.
Imagino que en ese momento pensó mejor hubiera
sido salir sin un arma, o mejor hubiera sido salir sin balas extras. Pero
bueno, así estaban las cosas. Yo sabía que estaba pensando en eso, y le dije:
-Se lo que estás pensando en este momento, sabes
que hubiera sido mejor?, que te busques una Puta de la calle y si no la
encuentras búscalas en el internet, hay muchas que se regalan por nada son
niñas cachivaches o chicas que están a tu nivel, la de la mugre y las malas
costumbres, talvez hasta encuentres una a tu medida que le guste ser golpeada y
sometida, igual no creo que tengas otra oportunidad, porque seguro que cuando
termine con Tigo te mato igual.
Y el tal Joni, volvió a llorar y pedirme perdón.
Después le volví a atar sus dos manos que se
acomodara la ropa y lo lleve caminando también atado con un alambre del cuello
hasta el auto, solo pasaron 2 coches y miraban para otro lado. lo ate al
paragolpes de atrás y le dije que me ayude a empujarlo hasta la bajada, pero
cuando arranque que acompañe al movimiento porque si se caía se decapitaba, y
accedió también sin remedio, lo empujo con su cuerpo, porque sus manos estaban
atadas por detrás, cuando llegamos a la bajada de la Calle Rivadavia, lo puse
en segunda y arranco, pero lógicamente trate de no acelerar, no quería cortarle
la cabeza, el seguía acompañando al trote al coche, sin remedio, todos en la
facultad lo miraban, y se reían, algunos en coches nos pasaban a los bocinazos,
yo no entendía nada porque, me dije la gente está bien loca, más que yo, luego subí
por la calle Hipólito Hirigoyen, quería pasearlo así por el centro, lo miraba
por el espejo se lo veía muy agitado y baje la velocidad, después entre por
calle Justa Lima, y pare para comprar otra gaseosa, primero tome yo y luego le
di un poco a él depravado, se lo veía cansado, muy lastimoso, y apenado, un
patrullero nos pasó pensé que me detendrían, en ese caso sabría que decirles y
peor para él, pero no fue así, solo me saludaron a los bocinazos, yo seguía sin
entender, que diablos! que nadie hace nada!, me volví a bajar y le iba a
preguntar por qué todos te saludan?, y justo en ese momento escucho que una
mama le dice a sus dos hijos , chicos miren es una despedida de solteros,
saluden!!!, y comprendí porque tanta locura permitida, Así que decidí cambiarle
el castigo, levante la puerta baúl y le dije sentate, y lo lleve a toda
velocidad sentado en la parte de atrás del coche a un descampado y le volví a
golpear hasta el cansancio, me senté un rato a mirar las estrellas, y a pensar
que aria con él, cuando me recupere, le volví a dar otra propina de golpes y
patadas de toda clase, por último lo deje tirado, y atado en un poste de luz de
la Avenida Antártida Argentina, le advertí que si volvía a verlo personalmente
me encargaría de convertirlo en historia, y me fui a casa a dormir. Por cierto,
Casi lo olvido, al día siguiente era nota de tapa en los diarios zonales,
"Un hombre fue encontrado atado con alambres en un poste de luz con un
revolver calibre 22 introducido en su ....". Bueno, ya se imaginan.
(c) Héctor A. Palavecino. Fragmento del libro "La espada Azul"- ISBN 978-987-33-7591-0 / ISBN 978-987-33-8866-8